miércoles, 29 de junio de 2011

Razones

Porque aunque no lo creas no solo querer es poder, necesitas poner más empeño a las cosas, más dedicación y pasión. Los besos no son simples mustras de cariño, son largos segundos en el que dos almas se fusionan.

viernes, 24 de junio de 2011

Perdón.

Son esos momentos en los que conoces a alguien que repentinamente llena tu vida. Tu corazón salta de alegría, de genialidad, de cariño, de eufória, de amor...de mil cosas que sabes que son indicadores de placer. Pero tu te preguntas por qué eres tan idiota de ver que una persona que necesitas se escapa de tus manos. Tu te ahogas, te quedas sin respiración, sin nada. Lo único que piensas es en escapar en salir de ese lio, de escapar, de aliviar tus penas en el alcohol.

Te sientes lo peor. Necesitas ser algo, así que, vas a una playa te tumbas en la arena, una arena fina, blanca, de una temperatura fresca y complicada de sentir. Se te entrelaza en las manos mientras miras a un cielo estrellado, melancólico, delicioso. Sin saber que hacer dos pequeñas lágrimas se escapan de tus ojos marinos. De repente, oyes unas leves y dulces pisadas por la arena de aquella playa. Te levantas muy suavemente dejando que la arena resbale por toda tu piel morena. Miras al horizonte y la ves. Ves esa silueta que te vuelve loco, que deseas sentir, besar y tocar. Visualizas cómo esa sombra perfecta se acerca cantando una armónica melodia la cual tus oidos disfrutan. Cierras los ojos y dejas que el sonido del mar en una perfecta armonía con la melodía, relaje tu cuerpo.

De pronto, la melodía se para y escuchas tu nombre, pronunciado por una sensual voz que te estremece. Mirando hacia arriba duscubres la tez de esa chica que te ha hecho volverte loco. Deseas congelar el tiempo, que todo se detenga. Sus ojos cuyo color solo se podía comprar con el paraíso, se clavan en tus ojos, se sienta a tu lado y se enciende un cigarro. Contemplas como sus labios recíen pintados con el color de la pasión, contactan con el cigarro. Calada a calada tu sientes como se encoge tu pecho, se acorta tu respiración y se entrecortan las palabras, pero sin quererlo notas cómo ella apaga el cigarro y se acerca a ti susurrándote:-Deseo que este momento no se acabe nunca.- Comenzáis a besaros y suavemente os tumbáis en la arena fundiendoos en un cálido y romántico abrazo.