Inspiracion

Inspiración: Fuente de sueños y rotura de barreras, ese momento en el que la libertad es ilimitada, donde la imaginación tiene alas. La inspiración es la madre de la locura, cuento más inspirado estés, más loco pretendes estar. Cuanto más tengas en ti que te inspire, serás algo más capaz en tus relaciones. Cuantas más cosas te llenen, menos cosas necesitarás,si te llena de satisfacción una amistad, ¿Qué más dan los objetos y las cosa inservibles?.

Dios

Hoy miré al cielo. Estaba despejado y los pájaros entonaban un alegre canto, que hacía de aquella mañana algo más que una simple mañana de verano. Cada mañana, yo salía en busca de algo que me hiciera creer en el más allá, en un firmamento lleno de Ángeles, Santos y Dioses. Pero todo esto se me derrumba cada vez que noto la sangre que corre por mis venas. El firmamento se abre, y las estrellas condenan a las criaturas a un pecado infinito. El dolor se cierne en mi cabeza, y los ángeles se vuelven centauros que con sus espadas atraviesan toda alma que ven. Presiento engaños, traiciones y éxtasis.

Todo, gracias al cielo, ha sido un vano sueño. Un sueño que he sentido en mi alma. Ahora sí, es de día, el cielo, encapotado, anuncia tormentas. Mis pensamientos son:- Quizás los dioses están en guerra-. Pero como eso es solo un cuento, una mísera ilusión que pocos creen, y creen en ello para tener en qué refugiarse a la hora de llegada del dolor.

Reflexión.

¿Existen esas personas, especiales, cariñosas, que apoyan en los momentos difíciles?¿Existen esas personas que se hacen llamar amigos, o son meras ilusiones creadas por nosotros para tener en quien apoyarnos?

the End

Batallas que llenan de sangre las místicas mantas de la iluminación. Estas llenan de odio al dios de los muertos, que desquiciado por tanta luz decide instaurar la guerra entre los mundos. Los vivos contra los muertos. La lucha más esperada, siempre deseando que la guerra sea con dolor, sufrimiento y vida. Es una batalla por la vida, los vivos desean seguir su camino y los muertos desean arrebatar la carne, los sentimientos y en sí, la vida, a los humanos. Ades de los infiernos, ¿por qué haces esto, será por tu afán de dolor, o por el simple hecho de que a los humanos ya nos llegó la hora? Si, es la contestación; tu contestación sorda, hueca y bastante fuerte, en tono doloroso.

Ya se oyen los cuernos de guerra. La batalla se ha iniciado, sangre corre por agua, los gritos son el viento y los choques de las espadas son los únicos truenos que interrumpen los gritos. Los valientes mueren, la guerra está siendo ganada por Ades; su poder arrasador es algo imparable, su sed de sangre es insaciable. ¿Cómo se le puede parar, por qué hace esto? Son preguntas que nadie puede contestar, solo el tiempo y la victoria de uno de los bandos lo descifrará. Mientras, yo, escribo en mi pequeño diario las pequeñas anécdotas del día; cosas del calibre:- Querido diario, hoy he contado una cantidad de 219 cadáveres por este suelo, el cual cubierto de sangre , quiere indicarme que cada vez queda menos para que esta lucha termine. Mi madre hoy ha sido violada y después torturada. Los muertos la han raptado mientras intentaba traernos comida a mí y a mi hermana de 2 años. Mi padre está en la enfermería, ya que ha recibido 10 puñaladas. Querido diario, si estas son mis últimas palabras, quisiera decir que quien lo encuentre, siga escribiendo su vida; y así sucesivamente, para que todas las generaciones cuenten su vida-. Podéis pensar que para ser un niño de unos 16 años aproximadamente, soy un tanto duro.

Ya han pasado varios meses, parece que la guerra de los mundos así llamada por los poco medios que quedan va a finalizar. En mi tierra natal apenas quedan 1000 guerreros, pero parece que Ades a padecido en sus frentes. Mi padre encabeza un de las pocas guerrillas de por aquí cerca. Y mi madre, aun haber sido maltratada, nos sigue cuidando y dando educación.

Hoy 25/12/2052 acaba la guerra, la victoria para los hombres si, pero quedan en la tierra 15 países. los demás fueron arrasados por Ades.

perfection.

Quisiera ser libre. Ahogar mis penas volando. Ser aire que respiran los demás, ser llanto que los demás ansían. Quisiera ser un abrazo, un beso quizás, pero lo que de verdad ansío es ser una mirada. Eso que todo dice, eso con lo que se descubre una verdad o se encuentra una mentira, o esa con la que incluso encuentras el amor. Quizás es eso lo que en verdad busco, el amor, alguien que siempre sepa como estoy, que sepa en cada momento qué decirme, cómo consolarme, que en cada momento sepa darme el beso que me alegre el momento.

Quiero que esos besos hagan que el tiempo pare, que las sonrisas congelen en aire, que las miradas prendan el pecado, que el pecado sea paraíso extremo y que la vida se viva como la muerte, fría, calculadora y vana. que los besos se fundan en placeres, que los placeres sean imposibles de alcanzar, mientras que los besos, tanto dulces, falsos, amargos, de café, de cacao, de tabaco... Mientras que estos sean placenteros serán válidos,ya que serán imposibles. La imposibilidad es perfección, y la perfección es vida. Por lo que la vida es perfectamente imposible de besar, qué cosas son las que nos pasan por la cabeza, cientos de ideas que no comprendemos. Leer esto es romper esquemas, es no entender que escribo, es desahogar mis penas o incluso decir mis alegrías, pero es que estos besos que describo son en verdad la vida que nos llena a todos de imposibilidad y de imperfección.

Cielo

Mientras la noche se caía nosotros nos abrazábamos lentamente. Era la primera noche que pasábamos a solas, tu y yo. El cielo nos observaba, envidiado, como si de un mar se tratara nos acompañó durante todo el viaje; este viaje que se trataba de caricias y besos. Esas estrellas que blancas, puras y majestuosas, nos miraban envidiosas de no estar tan juntas como nosotros. Tus ojos, tan claros como de costumbre parecían aún más claros, cosa que era de una improbabilidad enorme, que nunca. El azul de mi vestido resaltaba, mis ojos marrones eran casi verdes. Este mar de estrellas estaba haciendo aquella noche tan especial, como estaba siendo para mi.

La noche era impasible. Nosotros, él, mejor dicho, estaba apoyado en mi hombro. Yo, sentía un ligero cosquilleo. De repente, nos vimos interrumpidos por una estrella fugaz, tú me dijiste:-¡Mira!¡Pide un deseo!-, aunque no sabía muy bien que decir, decidí desear darte un beso. Así que me envalentoné, y balbuceando te dije:-Acércate-.Te quedaste sorprendido, pero, te acercaste. Te susurré y te reíste, fue una risa sorda y hueca. Me asustaste, me dejaste sin palabras, y de repente...me plantaste ese beso que yo deseaba en mis labios.